El eterno milagro uruguayo
El eterno milagro del futbol uruguayo se vuelve a repetir, y esta vez con una generacion excepcional de chiquilines con otra cabeza futbolera. Ya no se ven las patadas inutiles, ni las muestras del machito patotero que tanto mal le ha hecho a la imagen del futbol uruguayo, particularmente en los medios de prensa europeos. Estos juegan los 90 minutos al mango, con alegria y generosidad, futbol p’arriba y p’adelante. Ya son maestros en el arte del contraataque. (…)